El Bucio permite la producción de sonidos mediante grandes conchas, formadas como caracoles.
Esa forma de comunicación era común en las Islas Canarias durante la prehistoria.
Bucio era el nombre del instrumento en la lengua de los aborígenes para objetos que los españoles llamaban “caracol”.
En el municipio de San Juan de la Rambla, la gente sube a una alta montaña con comida y bebida, siguiendo una antigua costumbre de saludar al solsticio con el sonido sordo y retumbante de muchas conchas de Bucio.
El Bucio y sus accesorios están también muy presentes en muchos desfiles de romería de Tenerife, en Tegueste y La Laguna. entre otros.
(La versión alemana publicada en Megawelle, 2011 – 2016)