Gracias a los fuertes alisios, es posible disfrutar del windsurf en El Médano todo el año.
El pueblecito en el sur de Tenerife pertenece a los destinos preferidos de los aficionados a los deportes acuáticos.
El Médano también es el sitio preferido para hacer campeonatos nacionales e internacionales de esta modalidad deportiva.
En el tinerfeño paraíso de los windsurfistas hay escuelas para aprender la técnica. No obstante, para muchos principiantes los vientos y el oleaje en las aguas de El Médano son demasiados fuertes.
Para muchos novatos es recomendable, dar los primeros pasos sobre la tabla en otras playas de la isla.
Disfrutar de aprender y hacer windsurf en El Médano
El surf a vela (o tabla a vela) despierta mucha atención. Hacer windsurf es probablemente la forma más elegante de moverse sobre la superficie del agua.
En los años 70, el desplazamiento sobre el agua mediante una tabla provista de una vela llegó a Europa. Con el paso de tiempo el windsurf perdió su fama hippie y se convirtió en deporte para el gran público.
Es fascinante observar a los windsurfistas, deslizándose sobre el agua con mucha elegancia haciendo maniobres acrobáticas.
Sobre todo, cuando el viento sopla muy fuerte.
No obstante, alcanzar ese nivel cuesta muchos esfuerzos.
Los principiantes, que hacen sus primeros pasos en windsurf, tienen otros retos.
Para ellos es un éxito, subir en la frágil tabla y mantenerse de pie para izar el aparejo y comenzar a navegar –, sin caer al agua demasiado pronto.
Los deportistas necesitan materiales y habilidades para hacer windsurf
La práctica del windsurf depende de dos factores claves: la tabla y el aparejo, a lo que pertenecen la vela y el mástil.
El windsurfista navega la tabla por la botavara, una herramienta para mover el aparejo.
La botavara permite controlar la dirección de la tabla al inclinar la vela hacia delante o atrás, y acelerar o reducir la velocidad.
El equilibrio y la habilidad de coordinar los movimientos son fundamentales en el surf a vela.
La fuerza corporal tiene un papel secundario.
Hay que aplicarla sobre todo en momentos críticos, normalmente causados por errores.
En general, para los principiantes, el windsurf es físicamente mucho más exhaustivo.
Los cracs saben aprovecharse de la energía del viento y, por eso, son capaces de hacer el “waterstart”, una técnica que facilita subirse a la tabla desde una zona profunda ayudándose de la potencia ejercida por la vela.
El material también influye en la práctica del windsurf.
Hay tanto una amplia gama de tablas – largas y cortas, amplias e anchas – como velas de varios tamaños.
Gracias al amplio abanico de componentes, los windsurfistas tienen muchas posibilidades para adaptarse a todas las condiciones meteorológicas y aprovecharlas de la mejor manera.
Cuando el viento sopla muy fuerte y el oleaje es muy alto, se elige preferiblemente pequeñas velas y tablas, ligeras y rápidas.
¿Cómo aprender a hacer windsurf en Tenerife?
En Tenerife hay varios lugares, destinados a los deportes acuáticos, donde se practica el windsurf.
No obstante, una gran parte de los aficionados de la tabla a vela disfrutan del windsurf en El Médano, un barrio del municipio de Granadilla de Abona.
En Internet hay muchos sitios, por ejemplo www.windfinder.com, que ofrecen detalladas previsiones meteorológicas, enfocadas en el tiempo, el viento y el oleaje de la costa de El Médano.
Las aguas del tinerfeño paraíso de los windsurfistas destacan por cracs que conocen las particularidades del sitio y dominan tabla y vela en cada momento.
Deportistas que vienen por primera vez, normalmente necesitan un rato para acostumbrarse a las condiciones que ofrece El Médano.
Eso no tiene solamente que ver con los vientos, que soplan mucho más fuertes que en otros lugares, sino sobre todo con el oleaje.
En las aguas de El Médano, las olas son mucho más altas y largas. Eso afecta mucho al manejo de tabla y aparejo.
Hay que tener suficientes habilidades para adaptarse a las condiciones del sitio.
En el caso contrario, practicar windsurf en las aguas de El Médano es muy agotador y menos gratificante: el novato vuelve a montar a la tabla muchas veces sin resultados satisfactorios porque casi siempre cae al agua antes de empezar a navegar.
Por eso, no es aconsejable intentar aprender a hacer o practicar windsurf allí antes de ser capaz de orzar/arribar con fluidez y dominar el waterstart.
Las playas de Playa de las Américas y Las Galletas son mucho más adecuadas para principiantes que hacen sus primeros pasos en el windsurf, porque las brisas son mucho más suaves y el oleaje menos fuerte.
Además, allí hay también escuelas que invitan a aprender la técnica y hacer windsurf.