De verdad, incluso los Beatles estaban en Tenerife. Vale, no salieron en el escenario y John Lennon hizo falta, pero pasaron unos días, maravillosos y estupendos, en la isla.
En abril de 1963 visitaron a su amigo íntimo alemán Klaus cuyo padre tenía un chalet en el término de la Montañeta en el municipio de Los Realejos.
Los Beatles le habían conocido a Klaus y a su compañera Astrid Kirchherr en su época de Hamburgo cuando actuaron en sitios, hoy en día legendarios, como el Star Club.
La fotógrafa está vinculado a los “Fab Four” como la persona que impulsaba el corte de peo inconfundible que marcaba la imagen del grupo durante la primera mitad de los años.
Klaus, más tarde diseñaba la portada del álbum “Revolver” y era el bajo en actividades musicales en solitario de los varios de los Beatles, entre otros.
Después de las grabaciones de su primer disco de larga duración, “Please Please Me”, el conjunto musical necesitaba un descanso y Paul McCartney se acordaba de los cuentos entusiásticos de su amigo Klaus sobre una isla muy curiosa, ubicada enfrente de la costa del continente africano
En estos días pasar unas vacaciones en Tenerife “de ensueño”, se acuerdo Klaus Voormann.
El año 1963, los Beatles aterrizaron en Tenerife
En estos días, los alemanes habían empezado a descubrir “los países vecinos y cercanos”, Suiza, Austria, Francia o Italia. Las Islas Canarias “eran un destino extraordinario” y fuera del alcance de la gran mayoría de gente, viajar por allí era “más o menos una aventura verdadera”.
El 28 de abril de 1963, Paul, George y Ringo aterrizaron en el aeropuerto de Tenerife en Los Rodeos, el único que había en la isla tinerfeña en estos días.
El pasaje hacia Los Realejos era también probablemente menos confortable y, por cierto, más complicada que en la actualidad por la falta de las autopistas.
Hay que tener en cuenta que hace cinco décadas ni siquiera la mitad de la población actual vivía en las isla y alrededor del setenta por ciento de la edificación no existía, sobre todo en las zonas rurales.
A los Beatles, la estancia en Tenerife, “una isla volcánica en el sur impresionaba mucho”, subraya Klaus Voormann, a lo que los músicos regalaron un ejemplar de su tercer sencillo “From Me To Tou”, que salía unos días antes del despegue.
“Los chicos, provenientes de la ciudad industrial británica de Liverpool”, según Voormann “nunca habían “salido al exterior, aparte sus viajes a Hamburgo.”
No obstante, el aspecto de entonces de la cuna del turismo tinerfeño distinguía mucho del actual.
Atracciones actuales como Playa Jardín o Loro Parque probablemente eran ni siquiera visiones de sus futuros promotores.
Por supuesto, hacían una excursión por el paisaje, tan enigmático como emblemático de las Cañadas del Teide, no obstante, en estos días, el teleférico no era más que un borrador de proyectos y el observatorio de Izaña una instalación científica en construcción.
En esta época, la Playa Jardín y el Loro Parque no existián
Paul, George y Ringo además tenían la suerte de vivir en primera persona las Fiestas de Mayo santacruceras y asistían a una corrida de toros.
El espectáculo que no se celebra en Tenerife hace décadas, impresionaba mucho a Paul McCartney.
En las palabras de su anfitrión Klaus Voormann George, Paul y Ringo vinieron a Tenerife para desconectar unos días, dar un respiro para seguir triunfando a continuación.
Llegaron unos días antes mi veinticinco aniversario para pasar un buen rato con mi y Astrid.
Pasábamos unos días maravillosos e inolvidables.
El paisaje, la gente, la cultura todo les asombraba.
Pero la cosa más importante era disfrutar la tranquilidad.
Además, era la última vez cuando podían moverse Paul, George y Ringo pasaron sus vacaciones en la finca idílica realejera de los Voormann.
Disfrutaban de las playas del balneario vecino del Puerto de la Cruz y, como turistas de promedio, sufrieron quemaduras de sol.
Muchas tardes pasaban en el Bar Dinámico en la Plaza del Charco, llamada de General Franco entonces. libre como una persona normal.
En este momento a ellos les no pegaba la etiqueta de “Beatle”. Nadie en Tenerife les conocía en este momento, un poco más tarde las cosas eran completamente distintas”.
Por Klaus Voormann, el presidente honorífico del festival “50 aniversario. Los Beatles en Tenerife”, estos días hace medio siglo han sido “siempre momentos, singulares e incomparables a lo que tengo gran cariño.
Voy a pasar mi 75 aniversario en este sitio junto de mi familia y tengo mucha ilusión.”
(Publicado en Megawelle, 2011-2016)