Tenerife es el paraíso de los cineastas. Gracias a su paisaje de ensueño, los antiguos cascos históricos y sus pintorescas casas, el Océano Atlántico y el agradable clima, la isla se ha convertido en una “localización” predilecta a nivel mundial.
Un ejemplo es “Falkenau, la casa del guardabosque (Forsthaus Falkenau)”.
El pasado día dos de enero, unos seis millones de espectadores vieron el capítulo especial de la serie alemana que se rodó en el norte de Tenerife entre el 22 de octubre y el 12 de noviembre del año pasado.
El capítulo emitido por la cadena de televisión ZDF, una de las más importantes de Alemania, en horario de máxima audiencia obtuvo una cuota de pantalla de 17,8 por ciento.
Los cineastas necesitan una gran variedad de servicios a nivel local
El capítulo de una duración de 90 minutos, se rodó en la Playa Jardín, el Loro Parque, La Orotava, el Faro de la Punta de Teno, Garachico y el puerto de Santa Cruz, entre otros.
Los trabajos de rodaje tienen un gran valor publicitario para el turismo de la isla.
Los expertos en comunicación han constatado que las películas de cine y de televisión influyen mucho en la selección del destino turístico.
“Falkenau, la casa del guardabosque” también comprueba que los trabajos de rodaje dejan una importante suma de dinero en las cajas de los empresarios y las corporaciones locales.
El rodaje de cuatro semanas en Tenerife tenía un coste de un millón de euros.
El equipo local consistió de unas 50 personas.
La empresa tinerfeña Blackstone Pictures trajo el rodaje a Tenerife, tras ganar el concurso correspondiente, en lo que también participaron Gran Canaria, Isla Mauricio y Namibia.
Blackstone Pictures se encargó de todos los aspectos del rodaje en la isla, el alojamiento del equipo de rodaje y el desarrollo de los trabajos, entre otros.
La producción de una película es un complicado proceso que requiere la estrecha colaboración entre los cineastas y especialistas de diversos ámbitos.
La tarea de la dirección de casting es encontrar tanto a figurantes como actores secundarios para pequeños papeles y coordinar su trabajo.
En el episodio de “Forsthaus Falkenau” salieron unos 20 actores secundarios locales y más de 50 figurantes.
El reto de los localizadores es buscar lugares adecuados para el rodaje y solicitar los permisos necesarios de las diferentes autoridades competentes.
El Ayuntamiento lagunero se convirtió en una autoridad portuaria
En una gran producción también trabajan varios equipos de constructores, eléctricos y maquinistas.
Ellos preparan los lugares de rodaje y se ocupan de la construcción del decorado necesario.
Los encargados de catering prestan su servicio a todos los componentes, involucrados en el proyecto cinematográfico.
Los conductores y pilotos de helicóptero son responsables para que tanto el personal como el material llegue puntualmente al lugar del rodaje.
Una gran variedad de empresas ofrece servicios adicionales al rodaje.
Los alquileres de vehículos y maquinaria suministran coches, grúas y máquinas.
Las casas de decoración y los viveros proveen las plantas y el mobiliario a los cineastas.
Las agencias de viaje organizan las llegadas y salidas del equipo alemán y los agentes de aduana supervisan la importación del equipo técnico.
Médicos, traductores, fotógrafos y personal de seguridad están contratados directamente en Tenerife.
“Falkenau, la casa del guardabosque” no es la única gran producción que tuvo lugar en Tenerife en los últimos años .
La isla, también sirvió como plató para el drama sobre el hundimiento del carguero “Pamir” que desapareció hace medio siglo.
En este caso, el Ayuntamiento de La Laguna fue un actor más al convertirse en la autoridad portuaria de Buenos Aires.
Numerosos aficionados de coches antiguos prestaron sus vehículos clásicos para el rodaje.
Asimismo, rusos rodaron escenas de una serie histórica en los cascos antiguos de La Orotava y del Puerto de la Cruz.
Y por supuesto, hace poco, Tenerife fue el centro neurálgico de la producción de “Óscar” sobre la vida de Óscar Domínguez.
La película española que refleja la vida del pintor surrealista originario de Tacoronte, contó con la participación de grandes estrellas como Joaquín de Almeida y Victoria Abril.
(Publicado en El Guanche/Bajamar, 2008)