Este domingo, se celebra un concurso del Arrastre del Ganado. El sol brilla sobre los montes de Anaga.
Música folklórica suena en los bafles. Largas colas se han formado delante de las tiendas provisionales que venden bebidas y comidas.
Hombres, mujeres y niños están sentados en largas mesas de charnelas, comiendo carne fiesta en platos de cartón.
El vehículo del vendedor de helados está presente, como de costumbre.
Esta tarde tiene lugar una feria de ganado en la plaza de festejos de San Benito, un barrio de La Laguna.
Ganaderos inspeccionan centenares de bovinos en la paradera seca y dan también vistazos a los pequeños corrales de cabritos saltones, gallinas cacareadoras y ovejas en reposo.
Algunos agricultores conducen una yunta para arar un campo improvisado, una técnica tradicional que se utiliza aún hoy en día en las medianías de la isla para cultivar las papas, en regiones donde las condiciones paisajísticas impiden el uso de máquinas agrarias.
El momento culminante de la feria es el concurso de Arrastre del Ganado, un deporte autóctono que tiene su origen en la vida tradicional de las islas, en una época en que los bovinos arrastraron paletas pesadas sobre caminos de tierra llenos de baches, para suministrar a los pueblos materiales de construcción y mercancías.
A partir de los años cincuenta, por primera vez en el año 1949 en La Laguna, presentaciones de las habilidades de los arrastreros forman parte de las fiestas populares de los pueblos.
A lo largo del tiempo muchas representaciones se han convertido en competiciones.
En 1989 se fundó la primera asociación que se convirtió hace tres años en la “Federación de Arrastre Canario” (FAC) que organiza los concursos, lleva costes de viaje y facilita los premios de los ganadores.
El “Arrastre de Ganado” también es muy popular en La Palma y Gran Canaria. Pero en la isla vecina se usan otros arneses de montar.
Los bueyes más fuertes arrastran once sacos y la paleta
Hace 19 años existe el campeonato canario, donde se miden los mejores deportistas después de triunfar en su isla.
Junto a los actos para demostrar la habilidad en Tenerife, tiene lugar cada año una serie de doce torneos de Arrastre del Ganado.
La asamblea anual general de la asociación determina los participantes, yuntas de varias clases y categorías.
Se diferencian tres categorías de peso, separadas por machos y hembras.
Los bueyes más fuertes arrastran un cargo de once sacos a cien kilogramos y la paleta de 200 kilogramos adicionales; para las vacas más pequeñas seis sacos son suficiente.
Las yuntas pasan por un recorrido de setenta metros.
A la mitad del trayecto tienen que rodear un tonel sin tocarlo.
En caso contrario es necesario repetir una parte del tramo.
El reglamento del Arrastre del Ganado es muy rígido
El reglamento es muy rígido y contiene una variedad de sanciones como amonestación, resta de puntos y descalificación.
En general, los bovinos necesitan entre veinte y cuarenta y cinco segundos para acabar el recorrido si no hay situaciones complicadas.
Una yunta que se queda más de tres minutos en el recorrido está descalificada obligatoriamente.
El caso de desobediencia requiere toda la delicadeza del conductor para dirigir su yunta, no está permitido pegar a los bovinos.
Hoy en día, no solamente profesionales participan en los concursos, hay también aficionados, propietarios de un hatajo de ganado de cinco o seis ejemplares, que se preparan para los concursos de manera profesional.
El objetivo del entrenamiento es mantener la calma de los animales en cada situación, porque los torneos tienen lugar en un ambiente menos habitual para los animales.
En lugar del canto amable de las aves, en los alrededores de su prado rural, los bovinos están confrontados durante el día de concurso con los ruidos de una muchedumbre de personas ajenas, en una plaza de festejos muy frecuentada.
(Publicado en El Guanche/Bajamar, 2008)