Para los deportistas náuticos el surf es pasión, para los espectadores un espectáculo.
Es muy fácil mirar a los surfistas, contemplar cómo se levantan repentinamente.
No obstante, requiere mucha experiencia surfear por la pared de una ola y aparentar que es tan fácil como nadar en el mar, disfrutar con que ligereza bailan sobre las poderosas olas.
Para dominar el surf hace falta mucha práctica y unos buenos conocimientos de la técnica son fundamentales.
Por supuesto, se necesita destreza para poder levantarse en el momento justo.
Hay también que aprender a controlar la respiración, porque si te pones nervioso en un revolcón consumes más aire.
El surf tiene sus propias reglas
En la isla de Tenerife hay muchos aficionados que practican este deporte y escuelas que enseñan la técnica.
Por ejemplo, “La Marea Surf School” en la playa Martianez del Puerto de la Cruz.
Esta mañana ha llegado Alba para dar sus primeros pasos en el mundo del surf.
Ya se ha puesto el traje de neopreno, una protección eficaz contra el frío para poder permanecer largo tiempo en el agua con comodidad.
Ahora Alba está sentada junto a Iván (el instructor) y escucha atentamente las palabras de Iván, quien da una introducción teórica.
En una pizarra, Iván dibuja los puntos de referencia de los bordes que delimitan la zona de surf, los peligros y las corrientes.
Además de las advertencias de seguridad.
Hay que tomar la ruta hacia un punto de encuentro donde es posible un descanso antes de ir a por otra ola.
Es muy importante seguir todas estas explicaciones para poder disfrutar del baño, sobre todo, cuando hay un grupo de varias personas en el agua.
Muchas veces las olas son muy altas y cortan la vista.
Además, las masas de agua tienen una gran fuerza y pueden catapultar a los surfistas hacia adelante y hacerles perder el control.
Por eso, esta forma de organización es una prevención para evitar accidentes y lesiones.
Por la misma razón, hay que salir de la ola entre 5 y 10 metros antes de llegar a la orilla.
En el surf la posición del centro de gravedad es esencial
La gran cantidad de nueva información confunde un poco a Alba, quien hasta ahora nunca ha puesto un pie en una tabla de surf, y por eso es un poco difícil memorizar todo al principio.
Iván sigue explicando con una tabla de surf para principiantes (softboard) que hay que entrar siempre al agua con la tabla a un lado, el izquierdo o el derecho, pero nunca delante ni atrás al entrar o al salir, para así poder evitar posibles choques con las olas y evitar accidentes con los que la rodeen.
Por supuesto, también hay una técnica para moverse en el agua, aparte de la de para entrar.
“Es esencial la posición del centro de gravedad, es la misma posición que en el skateboard o en el snowboard o cualquier aparato en el que se necesite poner un pie delante y otro detrás”.
En el agua siempre hay que mantener una posición estable para evitar perder el equilibrio y caerse.
Para desplazarse en el agua hay que remar hacia adelante lo mismo que para nadar, pero con la cabeza erguida en el centro de la tabla.
Para sentarse en la tabla la mayoría pone el peso de su cuerpo en el medio de la tabla para así controlar más la zona de gravedad.
Los movimientos requieren mucha sintonía y fluidez
En el surf es tan esencial encontrar el momento apto como la técnica adecuada para levantarse en la tabla.
No hay que subir a la cima, pero en el punto más bajo de la onda hay que forzar el remo con las manos.
Luego se dobla una pierna hacía arriba y se empuja el cuerpo con las manos arriba.
Por supuesto, es un rápido curso de movimientos que, además, requiere mucha sintonía y fluidez.
Por eso, Alba ensaya la parte crucial del surf varias veces en tablas de la escuela puestas en el suelo.
Provista de los conocimientos básicos, Alba sigue al instructor hacia la playa con la tabla debajo del brazo.
El mundo de los surfistas tiene sus propias características.
Hay varias clases de olas: largas, altas, rápidas, olas de grandes masas de agua.
Por eso, cada día ofrece un nuevo reto al deportista.
Además, hay varias clases de tablas.
Los cracs saltan en tablas muy estrechas, cortas y frágiles sobre las crestas de las olas, la parte inferior limpia a base de roces y la superficie encerada para mejorar el apoyo en su aparato de deporte que está muy resbaladizo.
No obstante, las tablas para novatos, más amplias y largas, son mucho más pesadas y tienen un mayor volumen.
Antes de entrar al agua hay que calentarse
Cuando llegan a la playa, Alba e Iván ponen las tablas en la arena para hacer unos ejercicios de calentamiento, giran los brazos en varios sentidos y estiran los músculos y los tendones de las piernas.
Luego la tabla se une al pie del surfista por una cuerda, una medida de seguridad para evitar perder la tabla, y entran al agua.
Cuando el agua llega hasta la cadera, ambos se ponen boca abajo en la tabla para remar hasta el punto de salida.
En los vaivenes, Alba comprende enseguida de qué habló Iván durante su introducción teórica.
No es tan fácil remar con las palmas de las manos contra las olas, la cabeza siempre puesta en alto.
Hay también que acostumbrarse a mantener el equilibrio, porque las olas llegan sin aviso previo, sobre todo cuando la tabla se encuentra paralela a la cresta de las olas.
Mientras el instructor se mueve sin dificultades por los vaivenes, a Alba le cuesta avanzar con seguridad.
Antes de llegar a la zona de salida, ambos se relajan en el punto de encuentro, para coger fuerza y concentración.
Cuando llegan al punto de salida, Iván señala a Alba el momento apto para subir en un empuje a la tabla.
Pero la ola es demasiado rápida y lleva a la chica a las cercanías de la playa de donde tiene que volver a la zona de salida.
No es tan sencillo, cuesta un poco a los novatos avanzar solamente con los movimientos de los antebrazos.
Aprender el surf requiere mucha práctica y perseverancia
Las dos veces siguientes, Alba llega a ponerse en pie, pero tiene que apoyarse con las manos en la tabla y, por eso, no logra levantar el cuerpo, algo necesario para saltar sobre las olas como los surfistas experimentados.
“Es importante disfrutar todo con tranquilidad”, dice Iván.
El primer día siempre “es complicado porque el alumno tiene que adaptarse al nuevo ambiente”.
Aprender el surf requiere mucha paciencia, práctica y perseverancia, y teniendo eso en cuenta, la primera clase de Alba no fue tan mal.
Otra gente no llega a subir en la tabla.
Información sobre el surf en Tenerife:
La marea surf school, al lado del bar Puerto de la Cruz,
Tel: 922 10 55 34 (10:00 – 18:00)
www.lamareasurfschool.com
(Publicado en Megawelle, 2011 – 2016)