Los nombres de lo guanches están muy presentes en Canarias

En Canarias, los nombres guanches son muy populares.

Simbolizan hecho histórico y leyenda al mismo tiempo.

A menudo, los guanches son etiquetados como pacíficos nobles amantes de la naturaleza.

Pero eso no es tan cierto, dado que protagonizaron sangrientas disputas entre ellos por los pastos.

Además, las investigaciones actuales documentan, que la naturaleza tinerfeña sufrió grandes pérdidas antes de la conquista por los españoles.

Los propios guanches desmontaron con llamas partes de los densos bosques de la comarca de La Laguna para tener campos y comederos para su ganado.

En la Avenida de Puntalarga está la primera generación de esculturas en honor a los menceyes guanches
En la Avenida de Puntalarga está la primera generación de esculturas en honor a los menceyes guanches

Muchas veces, todos los nativos canarios están etiquetados como guanches.

Eso no es correcto, porque en La Palma el auarita vivía, el bimbache en El Hierro y el majo en Fuerteventura.

Las órdenes sociales eran también muy diferentes.

En La Gomera había un primitivo sistema tribal, en Gran Canaria existía una división del trabajo hasta arriba.

Incluso hubo jefes de guerra, los gayres, y líderes religiosos, llamados faycanes.

Sin embargo, es cierto que los indígenas de Tenerife cubrieron más cabeceras en los medios de comunicación en los últimos años.

Eso tiene mucho que ver con las numerosas momias guanches, traídas a la isla desde Sudamérica y Madrid.

Ahora están expuestos en el Museo del Hombre y de la Naturaleza de Santa Cruz.

Mucha gente lleva nombres guanches

La lengua de los aborígenes, se ha extinguido.

No se conoce ni la pronunciación ni la gramática.

Solo fragmentos del vocabulario quedaban.

Sin embargo, ofrecen suficientes indicios para derivar una relación con los dialectos bereberes del norte de África.

SSe sustituyeron las estatuas de piedra por figuras de bronce, material que resiste más al viento y la salada agua del mar
Se sustituyeron las estatuas de piedra por figuras de bronce, material que resiste más al viento y la salada agua del mar

Aunque no se ha hablado el idioma durante los últimos cinco siglos, numerosas palabras del idioma guanche están muy presentes, como nombre de lugar o de plantas.

Un ejemplo es el tajinaste.

Un libro recientemente publicado que enumera 1.000 nombres propios de los indígenas de las Islas Canarias muestra los nombres de muchas personas se remontan a la época guanche.

Bencomo o Xerach, por ejemplo, forman parte de un gran número de apellidos.

Hay también muy populares nombres arraigados en la época guanche.

Por ejemplo, Yeray es un nombre muy común para los niños.

El cantor ciego de folklore local Ruimán lleva el nombre de un hijo del príncipe guanche Bencomo.

Tampoco faltan las niñas bautizadas en honor a las princesas guanches Zorahaya, Dácíl o Guacimara.

Incluso el nombre de la isla de Tenerife se basa en un nombre propio canario.

La isla debe su nombre al de un príncipe guanche.

Se trata de Tinerfe, el bisabuelo del legendario Bencomo, el gran enemigo de los españoles.

El monumento al Bentor en la cima del Tigaiga en Icod el Alto. Tras la derrota final, el guerrero se arrojó a la profundidad para acabar con su vida
El monumento al Bentor en la cima del Tigaiga en Icod el Alto. Tras la derrota final, el guerrero se arrojó a la profundidad para acabar con su vida

Por cierto, uno de los hijos de Bencomo se llamaba Tegueste, como el actual municipio.

El Megawelle presentará diferentes nombres de los guanches y sus orígenes en las próximas ediciones.

1000 Nombres Propios Guanches” Centro de la Cultura Popular Canaria (12/2011). (www.centrodelñacultura.com).

La lengua de los aborígenes canarios está extinta. No obstante, muchos de sus nombres están muy presentes en la vida de las islas.

Por ejemplo GUACIMARA (o Guacimár y Guacina)

Ella era hija del Mencey de Adeje, BENEHARO, y prometida de RUÍMAN, hijo de BENCOMO, el poderoso mencey de TAORO en el Valle de La Orotava.

El matrimonio de ambos debía sellar una alianza militar entre los principados guanches en tiempos de las guerras contra los invasores españoles.

El padre de Guacimara hizo un doble juego y prometió la mano de su hija a TINGUARO, hermano de Bencomo, tras haber derrotado a los españoles en La Matanza.

Los amantes huyeron disfrazados de pastores y se escondieron en la vega lagunera.

Tras la derrota final de los guanches, fueron capturados por los españoles y condenados a muerte; más tarde indultado e incluso permitido casarse.

Por ejemplo BENTOR (también Ventor o Bentorojo)

Por ejemplo BENTOR (también Ventor o Bentorojo). No se sabe con exactitud que era una persona real o simplemente protagonista de una leyenda histórica.

Sin embargo, en algunos documentos del siglo XVI BENCOMO sale como hijo de BENCOMO, legendario mencey de TAORO.

Tras la muerte de su padre, Bentor, el último príncipe guanche, condujo a las tribus rebeldes de Taoro, Tacoronte, Tegueste, Icod y Daute a la batalla final el 25 de diciembre de 1494.

En la misma zona del Acentejo, lugar de la victoria sobre los españoles, los guanches sufrieron la derrota.

Desde el alto zócalo el mencey Pelinor vigila por Adeje
Desde el alto zócalo el mencey Pelinor vigila por Adeje

A continuación, BENTOR se arrojó desde la roca Tigaiga para escapar de la amenaza de la esclavitud.

Su nombre deriva de la expresión tuareg “wenchorit”, que significa “saltar hacia abajo”.

El trágico destino del último mencey se plasmó en la construcción de una estatua de bronce de tamaño mayor que el natural en el mirador de Icod el Alto, que ofrece vistas a todo el valle de La Orotava.

Por ejemplo PELINOR. O Perinor.

Así se llamaba el “Rey” de Adeje en la época de la conquista de Tenerife por los españoles.

A él le recuerda el monumento de la rotonda central del pueblo.

En su época la isla constaba de nueve menceyatos en la parte superior de los cuales había un “mencey”.

Pelinor, dicen las crónicas, fue apreciado tanto por los guanches como por los españoles.

A los últimos, les gustaba probablemente mucho, que el mencey no intentó resistir ante su proyecto.

En eso no se diferenció de los demás reyes del sur de la isla.

Además, el centro del poder de la época guanche estaba en el valle de La Orotava.

El monumento a la princesa Dácil en La Orotava
El monumento a la princesa Dácil en La Orotava

Después de la conquista, Pelinor fue bautizado y cambió su nombre. Se llamó Diego de Adeje y recibió de los españoles tierras incluyendo regadíos en la comarca de Erjos y Masca.

Se casó con una española y el padrino fue el conquistador Fernández de Lugo.

Más tarde, su hermano Pedro incluso se convirtió en el regente de de Tenerife.

Por supuesto, eso suena como un cuento.

Por eso, muchos historiadores dudan de la existencia, o al menos el origen guanche, de ese príncipe.

El nombre “Pelinor” no se puede clasificar en términos de historia lingüística.

La raíz de eso puede ser un error ortográfico que ha sobrevivido durante varios siglos, dado que las sílabas “Bel” y “Nor” forman parte de varios nombres guanches.

Los nombres guanches. Por ejemplo DÁCIL

Por ejemplo DÁCIL. Se dice que ella fue hija del Mencey BENCOMO, poderoso mencey de Taoro, que se atrevió a desafiar a los españoles.

Y además, la sobrina de TINGUARO, el general que causó a los españoles la derrota de La Matanza.

No obstante, como parece, Dácil no tuvo mucho en común con sus parientes rebeldes.

Incluso mantuvo una relación amorosa con uno de los conquistadores. Cómo canta por lo menos la poesía del siglo XVI.

Hay que añadir que esos versos son el único documento en el que Dácíl está mencionado.

Pero da igual, la bella historia que trata de hombres valientes y mujeres traicioneras, fue motivo suficiente para dedicarla a ella varios monumentos en Tenerife.

El más conocido está en la rotonda, ubicada en la calle que conduce al centro de La Orotava desde la salida de la autopista.

(Las versiones alemanas publicadas en Megawelle, 2011-2016)